Una enorme piedra sobresalía allí del suelo. Los expertos estiman su antigüedad en unos 1000 millones de años. Ahora tendrá lugar la tan ansiada recuperación y el transporte sobre un vehículo autopropulsado SPMT de Cometto. El «portador de menhires» Obélix, de los famosos cómics de Astérix, no podría haberlo hecho mejor.
Ya se sabe desde hace décadas que aquí dormía una enorme piedra en el suelo. Varias veces el arado del granjero se dañó por el contacto con la punta del coloso. Pero los expertos no conocieron el verdadero tamaño del mismo hasta que se liberó completamente en el año 2020. Este «bloque errático de Hüven», con una longitud de 5,8 metros, una anchura de 4,9 metros y una altura de 2,9 metros se ha convertido desde entonces en un imán de visitantes.
Una carga histórica sobre una combinación SPMT de Cometto de 18 ejes
Ahora llegó el momento de liberar esta piedra con un peso estimado de 100 a 140 toneladas de su escondite. La empresa Gertzen es responsable de este proyecto. Durante la preparación se construyó atravesando el campo un camino de obra de 370 metros de longitud con placas de acero. Sobre este camino provisional se desplazaron tanto la grúa como también la combinación de transporte autopropulsada SPMT hasta el lugar del hallazgo.
Con la precisión necesaria, la grúa levantó la piedra y la colocó cuidadosamente sobre el módulo para cargas pesadas. «Se eligió una combinación de 18 ejes, ya que el recorrido de 4,5 kilómetros permite el desplazamiento con una carga por línea de ejes máxima de 12 toneladas. Para esta tarea solo podía ser adecuado un vehículo autopropulsado de este tipo, con una maniobrabilidad precisa y capacidad todo terreno», así explica el director de la empresa, Wolfgang Gertzen, los motivos técnicos que llevaron a elegir este vehículo autopropulsado.
Y justamente estas ventajas fueron las necesarias desde la primera curva, que exigía pasar por debajo de una línea eléctrica. Para ello, el operador del SPMT, Ingo Wiggelinghoff, bajó la combinación 350 milímetros en modo de desplazamiento, pudiendo atravesar este cuello de botella sin peligro.
Dirección electrónica y carrera de 700 mm como ventaja decisiva
Los verdaderos desafíos para la empresa Gertzen eran la siguiente curva de 90 grados y la entrada a la carretera nacional. Aquí, la dirección electrónica del vehículo autopropulsado Cometto pudo demostrar sus ventajas. Con la ayuda de la dirección del camión y el desplazamiento diagonal, la combinación de 29,30 metros de longitud se posicionó de forma precisa en la vía.
En esta curva se encontraba además una caja de distribución de corriente en el camino de la unidad de grupo de potencia. Mediante el mando a distancia, el operador Ingo basculó la unidad de motor hidráulicamente hacia arriba en 12 grados. Para ganar aún más altura, los ejes del SPMT se movieron 350 mm hacia arriba. De esta forma, el borde inferior de la unidad de motor pasó con una precisión de milímetros por encima de la caja de corriente, evitando una interrupción del transporte.
Llegando al centro del municipio se requirió otra maniobra para superar una curva de 90 grados. Puesto que en este caso, el cruce era más pequeño que la longitud del vehículo, la única forma de realizar la maniobra era eligiendo un programa de dirección adicional, en este caso, el movimiento de carrusel. «Este tipo de maniobras de dirección y desplazamientos en curva tan exigentes y no habituales solo pueden realizarse con una dirección electrónica», así describe Joachim Kolb, Director de ventas de Cometto, los puntos fuertes del transportador autopropulsado en este tipo de aplicaciones.
Nuevo protagonismo del bloque errático en el centro del municipio
El bloque errático asume ahora un papel central en el nuevo diseño de la plaza principal de Hüven. Es el último paso de un largo viaje. Porque el recorrido de la piedra condujo durante la penúltima era glacial desde un glaciar de Noruega hasta el lugar del hallazgo. Durante esta época, hace unos 150.000 a 200.000 años, la capa de hielo también creó, mediante el transporte de masas de gres y arena, la elevación en la que finalmente se encontró la piedra.
Tras un viaje de una hora, el equipo de Gertzen alcanzó el destino con esta carga histórica. Las líneas de ejes SPMT de Cometto se utilizaron en esta misión en una modalidad de «alquiler cruzado». Ya que, además de las 6 líneas de ejes y la unidad de grupo de potencia de la flota de Gertzen, también estaban acopladas dos unidades SPMT de 6 ejes de la empresa Schares de Bocholt. Una prueba de cómo las fuerzas combinadas y el material compatible pueden convertirse en una unidad potente.